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El propóleo es una mezcla resinoso que las abejas recolectan de brotes de árboles, flujos de savia u otras fuentes botánicas. Se utiliza como sellador para espacios abiertos no deseados en la colmena y como barrera protectora contra amenazas externas como bacterias, virus y parásitos.
Algunas personas también utilizan el propóleo como suplemento dietético debido a sus supuestos beneficios para la salud, aunque existe poca evidencia científica para respaldar su eficacia.
El propóleo es rico en compuestos antioxidantes y antiinflamatorios, lo que podría explicar algunos de sus efectos beneficiosos en la salud humana.
El propóleo tiene varias propiedades medicinales debido a su riqueza en compuestos bioactivos como flavonoides, ácidos fenólicos y terpenos. Algunas de las propiedades más destacadas son:
El propóleo es una sustancia resinosa que las abejas obtienen de las plantas y tiene propiedades antibacterianas, antivirales y antiinflamatorias. Al usarlo para la garganta, puede tener varios efectos beneficiosos:
Se puede consumir en forma de spray, pastillas, o mezclado con miel, siendo ideal para personas que buscan un tratamiento natural para dolores de garganta.
No se recomienda el propóleo en los siguientes casos:
Personas con alergia a productos apícolas, como miel, polen o jalea real, ya que puede provocar reacciones alérgicas.
En casos de asma alérgica, por posible irritación de las vías respiratorias.
Niños menores de 2 años, salvo indicación médica.
Durante el embarazo o la lactancia, sin la supervisión de un profesional sanitario.
Personas que toman anticoagulantes o medicamentos para el hígado, ya que puede interactuar con ciertos tratamientos.
Siempre se aconseja consultar con un profesional de la salud antes de consumir propóleo, especialmente si existen condiciones médicas o tratamientos en curso.
RANCHO